Entre los correos que recibo, de vez en cuando publico alguno que me ha resultado llamativo. Aunque ahora estoy fuera de las aulas, no dejo de tener relación con los educandos del sistema y sigo al día del desastre cotidiano que hay en los centros educativos y en las familias. Así que este correo, que me parece muy sensato y atinado, lo pongo aquí para que llegue a quien competa.
Texto del correo:
"Me comunican compañeros de otros centros que están celebrando asambleas de profesores, a fin de emitir un manifiesto en los siguientes términos:
1. Nos negamos a adelantar, como se pretende, el programa de gratuidad de libros (los de años anteriores están en perfecto estado y supone un despilfarro cuya justificación desconocemos) .
2. Pedimos la cancelación de compra de ordenadores para los alumnos de primaria (los del año pasado están aún guardados, sin saber qué uso darles).
3. Sugerimos la supresión de becas, ayudas y programas para alumnos de nulo trabajo e inaceptable rendimiento (supone sembrar en asfalto y desmotivar en el esfuerzo).
4. Solicitamos la supresión de los liberados sindicales y de las subvenciones a los sindicatos. Ha quedado demostrado que negociar con ellos es lo mismo que rubricar en papel higiénico.
5. Exigimos que al acuerdo marco firmado por tres años, se le dé la misma fuerza de ley que a un convenio colectivo.
6. Solicitamos la supresión de las Unidades de programas y los cursos promovidos por los sindicatos; pedimos que se potencie la formación del profesorado a través de Internet y que se valoren los excelentes materiales cedidos de forma gratuita por los auténticos profesionales de la enseñanza y que en nada se parecen a los que nos ofertan.
7. Sugerimos que se supriman, por dos años, las actividades extraescolares subvencionadas.
8.- Pedimos la supresión inmediata de todos los llamados "programas europeos" , pues es un despilfarro con el único objetivo de viajar gratis y con pocas o nulas contraprestaciones educativas.
9. Rogamos que se corte el despilfarro de las interminables pruebas de diagnóstico. La enfermedad la conocemos a la perfección a través de las evaluaciones (¡aterrador fracaso escolar!), lo hace que falta es poner el remedio .
10. Exigimos que se consensúe, ¡de una vez por todas!, una Ley Orgánica para la Educación que sobreviva a la alternancia en el poder de los dos principales partidos políticos, que se valore el esfuerzo de los alumnos y se potencie la dignidad y la autoridad de los profesores.
¡La primera reforma estructural pendiente en nuestro país es la educativa y si no se aborda con acierto, nunca se sentarán las bases para la capitalización del factor humano, el desarrollo tecnológico, la innovación, la productividad y en definitiva, el empleo!."