La verdad es que me resulta complicado escribir hoy algo que tenga sentido sobre la fiesta que celebramos. Precisamente esta semana hemos conocido que el paro en España ha llegado al 20% y a eso hemos contribuido los andaluces con un tremendo 27%. Y el caso es que no parece que nadie esté tomando las medidas necesarias para cambiar la evolución de todo esto. Familias completas viven del subsidio, otros aprovechan para embolsárselo sin tener derecho, en economía sumergida en Andalucía somos expertos y es de todos conocido. Quien más y quien menos ha convertido la ayuda social en un sobresueldo, muchos o pocos tanto da, es tremendo que nos hayamos acostumbrado y lo hayamos convertido en una especie de "derecho" que sirve a los propósitos electorales de quienes aspiran al poder, a tenerlo o a retenerlo (y les molesta un montón cuando se habla de "clientelismo").
No voy a hablar de sindicatos para no decir nada inconveniente, pero mientras vivan del subsidio y sean incapaces de defender a los que no tienen trabajo tanto como defienden sus privilegios, mientras "apesebren" a tantos liberados encargados de no hacer nada (con honrosas excepciones, queda gente entregada e idealista) cobrando del esfuerzo de sus compañeros, pues, que quieren que les diga. Nada.
Hace más de un año me quejaba de la incuria de nuestros gobernantes que parecen estar dedicados a esperar a que pase la tormenta firmemente agarrados a sus poltronas y lanzando cortinas de humo, una tras otra. Ahora veo que tenía más razón de la que yo creía. Nuestros gobernantes parecen estar paralizados por una ideología incapaz de asumir la realidad, una visión de las cosas que sólo tiene como futuro político cierto acabar como Cuba, ya que no tenemos petróleo para acabar como Venezuela, esos paraísos de la democracia, la libertad y los trabajadores.
¿Qué estoy exagerando? Eso díganselo a los cuatro millones y pico de parados, díganle que el gobierno está haciendo de todo para ahorrar (jeje) y tomando las medidas necesarias para que el trabajo no sea un privilegio de unos pocos intocables.
Ah, por cierto, "el gobierno descarta que se pueda llegar a los cinco millones de parados", así que vayámonos preparando...
No voy a hablar de sindicatos para no decir nada inconveniente, pero mientras vivan del subsidio y sean incapaces de defender a los que no tienen trabajo tanto como defienden sus privilegios, mientras "apesebren" a tantos liberados encargados de no hacer nada (con honrosas excepciones, queda gente entregada e idealista) cobrando del esfuerzo de sus compañeros, pues, que quieren que les diga. Nada.
Hace más de un año me quejaba de la incuria de nuestros gobernantes que parecen estar dedicados a esperar a que pase la tormenta firmemente agarrados a sus poltronas y lanzando cortinas de humo, una tras otra. Ahora veo que tenía más razón de la que yo creía. Nuestros gobernantes parecen estar paralizados por una ideología incapaz de asumir la realidad, una visión de las cosas que sólo tiene como futuro político cierto acabar como Cuba, ya que no tenemos petróleo para acabar como Venezuela, esos paraísos de la democracia, la libertad y los trabajadores.
¿Qué estoy exagerando? Eso díganselo a los cuatro millones y pico de parados, díganle que el gobierno está haciendo de todo para ahorrar (jeje) y tomando las medidas necesarias para que el trabajo no sea un privilegio de unos pocos intocables.
Ah, por cierto, "el gobierno descarta que se pueda llegar a los cinco millones de parados", así que vayámonos preparando...
Que pena de país.
ResponderEliminarLos sindicatos de la mano del gobierno manifestándose(???) en el Día del Trabajo cuando tenemos más de cinco millones de parados.
Y encima tienen la desvergüenza, la jeta de sacar un comunicado diciendo que "en un día como éste, los socialistas queremos renovar nuestro compromiso con la defensa de los derechos de los trabajadores. Seguiremos trabajando y aunando esfuerzos para luchar contra el desempleo".
Creo que se refieren a "su" desempleo. Lucharán contra "su" desempleo con uñas y dientes, de lo demás parecen o no saber o no querer hacer nada.
ResponderEliminarUn saludo y gracias.