De vuelta del campamento, algo cansado aún, escucho está canción, un clásico de The Beatles. Como no sé inglés, siempre la he disfrutado sin entenderla, pero en este tiempo de la información sin fronteras me encuentro esta versión con subtítulos que además explica el sentido de la misma. Una canción al amor y la amistad, una canción para consolar a quién pasa por un mal momento en su vida cotidiana. Escrita por Paul McCartney para el hijo de Lennon que pasaba por el mal trago del divorcio de sus padres (antes de lo de Yoko Ono).
En todo caso, ¿quién no necesita una canción así alguna vez?
En todo caso, ¿quién no necesita una canción así alguna vez?
Rafael, como melómano decir que pedazo de tema el elegido.
ResponderEliminarComo persona espero que la reflexión haya estado en buena sintonía y sigas con este espacio que aporta no sólo discusión, sino también y lo que es más importante, un punto de vista distinto para muchos de nosotros.
Y como cibernauta, nada, a seguir rellenando la red y a no dejar de mantener una vía de escape sobre tu sabiduría. Saludos y espero que te hayas divertido y que hayas disfrutado.
Gracias Abel.
ResponderEliminarEl campamento bien con las dificultades habituales de tratar con niños y adolescentes. Encima nos llovió el día que más nos podía perjudicar, pero al mal tiempo buena cara y adelante.
Saludos.